La Fiscalía General del Estado afirmó que los elementos de la Agencia de Investigación Criminal no golpearon al comerciante Juan Carlos Padilla, y que éste murió de un infarto agudo al miocardio, según confirmó la autopsia.
Lo anterior pese a que la esposa de la víctima, acusó a los agentes de golpearlo, cuando cumplimentaban una orden de aprehensión en su contra, e incluso aseguró que llegó “muy mal herido” al Hospital General.
El vendedor fue sometido, pero no fue golpeado, reiteraron las autoridades.
La FGE informó que se investiga el accionar de los agentes y que Juan Carlos, que era vendedor de tamales, tenía una orden de aprehensión porque era acusado de un delito grave, sin embargo no se precisó cuál.
En un comunicado se se señaló que “el imputado opuso resistencia” al momento de su detención.
Autoridades aseguran que un grupo multidisciplinario realizó la autopsia, la cual fue grababa para que pueda ser analizada por expertos en la materia, refirió la dependencia.
A su vez la Fiscalía resaltó que Juan Carlos estaba en tratamiento médico porque tenía hipertensión y diabetes.
“Se continúa con el desarrollo de los protocolos de investigación que lleven al total esclarecimiento de los hechos, por lo que se lleva a cabo el acopio de indicios”