La tripulación del Dali sigue atrapada en la embarcación, luego de siete semanas del colapso, siendo más de 20 hombres que no pueden bajar por tema de visas.
En marzo pasado, el barco de carga realizaba un viaje de la ciudad de Baltimore, en Maryland, con dirección a Sri Lanka, transportando miles de toneladas de cemento y acero. La embarcación experimentó dos apagones y 10 horas después chocó contra el puente.
Este incidente dejó seis personas sin vida, trabajadores inmigrantes de México y Centroamerica.
A casi dos meses después del incidente la tripulación sigue dentro; son más 20 hombres de nacionalidad india y uno de Sri Lanka que aún no se sabe cuándo podrán descender o volver a sus hogares, ya que existen restricciones de visa y faltan los pases terrestres requeridos para la tripulación.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) han iniciado investigaciones paralelas para determinar qué fue lo que ocurrió y deslindar responsabilidades.
Los tripulantes quedaron prácticamente incomunicados con el mundo exterior durante “un par de semanas” después de que el FBI confiscó sus teléfonos celulares, como parte de la investigación, denunció una organización no gubernamental que protege los derechos de los marineros.