En el Gran Premio de Bahrein 2020 sucedieron varias tragedias, dos autos se incendiaron y uno acabó con las llantas para arriba, por fortuna nadie perdió la vida ni salió gravemente herido, en medio de ese caos, como ya es costumbre en la F1, nuevamente Lewis Hamilton volvió a ganar, impoluto, la estrella de Mercedes se alzó con la victoria escoltado por los pilotos de Red Bull, Max Verstappen y Alex Albon.
El siete veces campeón del mundo sumó con la misma autoridad con la que ha dominado toda la temporada su undécima victoria del año, demostrando que es el amo y señor de la Fórmula 1, la cual controla a su antojo.
Apenas comenzó la carrera Romain Grosjean impactó su monoplaza contra la barrera de contención, luego de que su neumático trasero derecho se encimara en el delantero izquierdo del Alpha Tauri de Daniil Kvyat; el Hass se partió separando la célula de seguridad del resto del monoplaza que ardía en llamas, de las cuales milagrosamente salió caminando el piloto francés, provocando una bandera roja que detuvo la carrera por más de una hora.
Los sistemas de seguridad y los cuerpos de rescate funcionaron correctamente. Tanto el tan criticado halo como el nomex, con el que está hecho el traje de los pilotos, le salvaron la vida al galo y la carrera se pudo retomar. Romain Grosjean había vuelto a nacer.
Aún le quedan dos carreras a la actual temporada, una más en Bahrein y la última en Abu Dhabi, por lo que el piloto mexicano todavía está en posibilidades de remontar el mal resultado de este domingo.