La muerte de dos ciudadanos estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas, generó tensión en ambos lados de la frontera.
Los dos rescatados, uno de ellos herido, regresaron a Texas y fueron hospitalizados, mientras las autoridades sospechan que los criminales los confundieron.
El pasado viernes 3 de marzo viajaron desde Carolina del Sur para acompañar a una de ellas a someterse a una cirugía estética, indicaron familiares a medios locales.
“Eran amigos de toda la vida”
Hicieron el viaje juntos, en parte para ayudar a dividir las tareas de conducción, pues estaban al tanto de los peligros en México.
Un familiar dijo que había advertido a su hija de no viajar, pero ella de todas maneras decidió ir para el procedimiento médico.
Los cuatro estadounidenses habían llegado a Matamoros desde Brownsville, Texas, el día en el que se registraron fuertes enfrentamientos con un número indeterminado de muertos que hicieron que las autoridades pidieran a la ciudadanía mantenerse en sus casas.