Agencias.- El Vaticano informó este martes del hallazgo de “fragmentos de huesos humanos” en un local anexo a la Nunciatura Apostólica de Italia, en Roma, y comunicó el suceso a las autoridades italianas para que emprendan una investigación. La Santa Sede explicó que los restos fueron encontrados el lunes en Villa Giorgina, en el transcurso de unas labores de reestructuración en el edifico situado en la Via Po 27, en pleno centro de la capital italiana.
Algunos medios italianos apuntan la posibilidad de que los restos hallados pertenezcan a Emanuela Orlandi, una adolescente que desapareció el 22 de junio de 1983 después de asistir a una clase de música en Roma cerca del Senado. El caso provocó un gran revuelo en Italia a raíz de sus posibles conexiones con las altas instancias vaticanas e incluso la mafia o el terrorista que intentó matar al papa Juan Pablo II y sigue dando de qué hablar 35 años después.
El fiscal jefe de Roma, Giuseppe Pignatone, ha pedido a la Policía Científica y a la Policía de Roma que investiguen la edad, el sexo y la fecha de la muerte y ha abierto una investigación con la hipótesis de un homicidio.
El Vaticano no ha dado más detalles del suceso. De hecho, la declaración del Vaticano no menciona en ningún momento a Orlandi -que hoy tendría 50 años- y se limita a señalar que los huesos fueron hallados durante trabajos cerca de su embajada en el exclusivo barrio residencial de Parioli.
El edificio en el que se han encontrado los huesos fue dejado en herencia al Vaticano en 1949 por el industrial y senador Abraham Jacob Isaiah Levi. El nombre se debe a su hija, que falleció de niña. Fue donado al Papa para agradecer que se recibiera a los judíos perseguidos en los conventos de Roma, detalla Vatican Insider, que recuerda que no se trata del primer episodio de este calibre. En el pasado ya se han encontrado huesos en edificios propiedad del Vaticano durante labores de restauración.
La adolescente era hija de un empleado de la Santa Sede, de un funcionario de la Prefectura de la Casa Pontificia, y tenía pasaporte vaticano.Los restos de la joven, que tenía 15 años en el momento de su desaparición, nunca fueron hallados.
A la banda de la Magliana, durante un tiempo el más activo grupo criminal romano vinculado a diversas mafias, se la relacionó con el posible secuestro de Orlandi. Otra de las teorías sobre la desaparición de Orlandi es que la raptó un grupo turco para forzar la liberación de Ali Agca, el terrorista que atentó contra Juan Pablo II.
Se han manejado otras hipótesis: que la chica murió en el interior el Vaticano, a manos de alguien importante, o que la banda de la Magliana quería presionar para recuperar los fondos de la mafia invertidos en el Banco Ambrosiano, que quebró. Otra, es que Emanuela fue víctima de una red de abusos sexuales y que las más altas instancias vaticanas saben la verdad.