Los problemas con la justicia se le continúan acumulando al rey emérito de España, Juan Carlos I, quien abdicó en favor de su hijo, el Rey Felipe, en junio del 2014 después de un reinado de casi 40 años.
La Fiscalía suiza localizó una cuenta bancaria con un fondo de 7.9 millones de euros de presunta procedencia ilegal, de hecho se sospecha que parte de esa dinero fue el pago de una comisión ilegal por su intermediación en la construcción de un resort de lujo en Playa del Carmen y que actualmente es propiedad de la multinacional española OHL.
El rey emérito está fuera del país desde agosto pasado, cuando empezaron a aflorar los numerosos casos de presunta corrupción en los que estaría involucrado.
De estos, hasta el momento hay al menos cuatro de los que hay datos concretos y que confirmarían una conducta criminal durante su largo reinado.
Además del pago de una comisión ilegal por el tren de alta velocidad a La Meca, de casi cien millones de euros, también se investigan el uso de supuestas tarjetas bancarias opacas, el uso de ingeniería financiera para la evasión fiscal y ahora esta cuenta que se localizó gracias a la actuación de la fiscalía suiza.
La fortuna estuvo escondida hasta fechas recientes y se advierte que “el hallazgo aporta pruebas adicionales contra Juan Carlos I por presuntas actuaciones delictivas después de su abdicación en junio de 2014.