Redacción.- Conocido como “El Hombre Bosque” Jadav Payeng es un activista medioambiental habitante de la isla de Majuli, localizada en el río Brahmaputra en la India; esta es una de las islas fluviales más grandes del mundo, sin embargo, la fuerte erosión de la que es víctima desde hace décadas, provocó que su tamaño se haya reducido significativamente.
Desde 1979, Payeng inició plantando un árbol cada día y se ha encargado de combatir el desgaste forestal transformando ese desierto en un verdadero oasis.
La situación de la tierra se debe a las inundaciones que azotan cada año durante la época de monzones donde el río destruye viviendas y erosiona cientos de kilómetros de tierra.
La transformación
Todo comenzó cuando Jadav tenía 17 años y encontró decenas de reptiles muertos en la arena del río por la falta de sombra. Para él esta escena resultó muy impactante por lo que advirtió del asunto a los servicios oficiales, quienes le aconsejaron tratar de plantar bambú y le ayudaron dándole los plantones.
Fue en aquel momento en el que inició su labor y lo que lo motivó a continuar plantando y cuidando de los árboles por 40 años.
El asegura que cuando los árboles crecieron, le era cada vez más difícil protegerlos. “La mayor amenaza eran los hombres. Ellos habrían destruido el bosque por fines económicos”, relata.
Creó un bosque entero de 1.400 acres, casi dos veces mayor que el Parque Central de Manhattan en EEUU.
A esta reserva natural le llamó ‘Molai’ y no solo detuvo la terrible erosión, sino también se convirtió en un refugio para aves, rinocerontes, tigres, elefantes y otras especies.
Su historia ha servido para documentales y películas y también ha inspirado a muchos ambientalistas a seguir sus pasos, demostrando que un solo hombre puede cambiar el mundo.