Raúl Jhoel Villarreal | Piedras Negras, Coah.- La mañana de este viernes el joven Ignacio Martínez Pacheco, visitó las instalaciones del Obispado de la diócesis de Piedras Negras con la intención de hablar con el Obispo Alonso Garza para demostrarle su encumbramiento hacia los actos de violación y pederastia por parte de Juan Manuel Riojas, conocido como padre Meño en el año 2004, cuando era un seminarista menor de edad y que después de vivir represalias por no silenciarse y huir, regresó con la intención de informar sobre su caso a la ciudadanía.
El ex director espiritual del seminario de la diócesis de Piedras Negras y actualmente sentenciado a 15 años de presión, según señala Ignacio Martínez, había actuado en redes de pornografía infantil y siempre fue encubierto por el Obispo Alonso Garza.
Formalmente ha procedido de manera legal interponiendo una denuncia ante la fiscalía de Estado, sin embargo el objetivo dentro del contexto religioso es que el Obispo sea destituido por el papa Francisco, debido a la situación de crímenes que ha permitido.
Al momento del arribo al Obispado, el personal de recepción mencionó que Alonso Garza Treviño nuevamente, al igual que siempre que este joven lo busca desde su regreso para encararlo, no se encuentra, que no hay sacerdotes disponibles para atenderlo e incluso, cierran la puerta principal por dentro.