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Un jovencito de 16 años falleció por las lesiones causada tras caerle encima una pared de concreto durante la tormenta y tornado que se registraron la tarde del viernes en el municipio de Apodaca, Nuevo León.
El menor trabajaba en un puesto de tacos y cuando pasó el tornado levantando vehículos y láminas, todos corrieron a resguardarse y él se puso detrás de la pared que finalmente fue derribada por los vientos.
Ocurrió en la autopista Reynosa-Saltillo, frente a la colonia Asturias y rápidamente fue trasladado a la clínica 67 del IMSS, donde horas después falleció debido a que presentaba traumatismos en abdomen y piernas.
