Redacción.- Los 695 casos diagnosticados de sarampión en lo que va del 2019 ya superan a todos los del año anterior.
El viernes pasado al presidente, Donald Trump, exhortó a los ciudadanos, en particular a los padres de niños no inmunizados, a que “tienen que ponerse la inyección, las vacunas son muy importantes”, dijo a unos periodistas frente a la Casa Blanca.
Es un detalle importante ya que, hace algunos años Trump vinculó esta vacuna con la posibilidad de desarrollar un trastorno del espectro autista.
La protección contra el sarampión es conferida habitualmente por la vacuna triple vírica o MMR, que protege también contra paperas y rubeola.
En lugar de administrar una sola dosis, Trump sugería que espaciarlas y poner seis vacunas individuales en lugar de dos MMR (primera dosis y la de refuerzo) reduciría espectacularmente los niveles de autismo. Varios estudios, el último en marzo de 2019, han demostrado sin embargo que no existe relación alguna entre autismo y la vacuna triple vírica.
Autism rates through the roof–why doesn't the Obama administration do something about doctor-inflicted autism. We lose nothing to try.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 22, 2012
Massive combined inoculations to small children is the cause for big increase in autism….
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) August 23, 2012
I'm not against vaccinations for your children, I'm against them in 1 massive dose.Spread them out over a period of time & autism will drop!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 4, 2014
Healthy young child goes to doctor, gets pumped with massive shot of many vaccines, doesn't feel good and changes – AUTISM. Many such cases!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 28, 2014
No more massive injections. Tiny children are not horses—one vaccine at a time, over time.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 3, 2014
Sin embargo, hay varios estados que permiten acogerse a la excepción de vacunarse por razones no médicas, tales como religión o ideología. En 12 de estos 18 estados este tipo de solicitudes para no vacunarse han aumentado desde 2009 según un estudio
Muchos de los casos de sarampión se han dado en campus de universidades de prestigio como Berkeley o UCLA, que actualmente tienen a unos mil estudiantes y personal educativo en cuarentena, lo que apunta a que no es sólo un problema de clases pobres o en riesgo de exclusión social sino también algo ideológico.