Una momia de más de 1.000 años aún con partes de piel y cabello, fue descubierta el pasado lunes por un equipo de arqueólogos en un complejo en las afueras de Lima, Perú, donde se han ido hallando varios restos desde el año pasado, indicó Reuters.
La momia que parece ser un adolescente, fue extraída de una tumba subterránea junto a cerámicas y soguillas, dio a conocer la arqueóloga Yomira Huamán, encargada del proyecto de investigación arqueológico de Cajamarquilla de la estatal Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
En el mismo lugar, pero en enero, encontraron restos de ocho niños y 12 adultos que habrían sido sacrificados en honor a un hombre de elite hace 800 o 1.200 años.
En la momia del adolescente apreciaron partes de piel impregnadas en la rodilla y cabellos en el cráneo, tendría unos 1.100 o 1.200 años de antigüedad y habría pertenecido a la Cultura Lima o Ichma.
El complejo de Cajamarquilla ocupa un área de 169 hectáreas donde se levantan restos de construcciones de cuatro pirámides, muros en forma de laberinto, entre otras edificaciones, y según los expertos es la segunda ciudad de barro más grande de Perú después de Chan Chan.