Los chips cerebrales de Neuralink, empresa de Elon Musk, entraron oficialmente en fase de pruebas en humanos y está buscando voluntarios que formen parte de los primeros experimentos oficiales de esta tecnología que tiene como objetivo permitir el control de dispositivos externos solo con la mente.
La compañía recibió los permisos por parte de autoridades estadounidenses para iniciar el proceso de selección de personas que cumplan los requisitos para implantarles un chip y superen una serie de pruebas para evaluar su eficiencia en un entorno controlado.
Los requisitos principales son tres: ser mayor de edad, ser residente permanente en Estados Unidos (no un ciudadano) y padecer ya sea cuadriplejia, paraplejia, afasia, ceguera, amputación de un miembro, Esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
Neuralink estuvo desarrollando la tecnología para desarrollar los primeros chips “N1” O “Links” desde el año 2017 con el objetivo de que estos sean comercializados como productos médicos destinados a que los pacientes con determinados cuadros médicos o discapacidades puedan recuperar algunas funciones físicas o interactuar con dispositivos electrónicos.