El presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, informó que se dio la instrucción de no darse por vencidos en la recuperación de los 10 mineros atrapados y aseguró, que no sucederá lo mismo que con la explosión de Pasta de Conchos.
Ya son 23 días de la inundación de la mina El Pinabete en Sabinas, Coahuila, perdiéndose ya la esperanza de encontrarlos con vida.
El jueves, las autoridades a cargo del rescate propusieron a sus familiares realizar un tajo abierto para abrir una entrada a la mina desde la superficie, trabajos que podrían tardar hasta 11 meses.
Dijo que se hizo otra revisión técnica y los técnicos decidieron que la otra opción era escarbar el terreno para poder entrar a la mina, “el problema es que eso lleva más tiempo, así que antes de tomar esa decisión di la instrucción de que se consultara a los familiares, ya se hizo y ellos no están de acuerdo, no es que no quieran rescatar a sus familiares, es que les parece mucho tiempo”.
Esta propuesta no fue aceptada por los familiares al considerar que es mucho tiempo el estimado para efectuar esas tareas de rescate.
El mandatario destacó que se extraen de 600 a 800 litros por segundo y que no ha parado el bombeo, pero reconoció que siguen estando altos los tirantes de agua.
“Es muy triste, entendible, la situación de los familiares de los mineros atrapados. Merecen toda nuestra consideración, respeto, son situaciones muy graves, lamentables”, comentó.
López Obrador agregó que este viernes se analizará la posibilidad de acortar el tiempo para realizar el tajo abierto, a fin de concretar el trabajo.
El gobierno se comprometió con las familias de las víctimas a realizar el rescate, además de ofrecerles una indemnización.