Mientras en Jamaica se preparan para el impacto del huracán Beryl de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, el meteoro ya dejó seis víctimas mortales e importantes daños en el sureste del Caribe.
Jamaica estaba bajo estado de emergencia y la isla fue declarada zona de desastre horas antes del impacto.
En la capital, Kingston, la gente tapió sus ventanas, los pescadores sacaron sus barcos del agua y autoridades desmontaron anuncios publicitarios de las carreteras para protegerlos de los potentes vientos que se pronosticaban.
El primer ministro jamaiquino Andrew Holness dijo que la declaración de zona de desastre seguirá vigente por siete días. Anunció además un toque de queda para toda la isla entre las 6 de la mañana y las 6 de la tarde del miércoles.
Había una alerta también para las islas Gran Caimán, Pequeña Caimán y Caimán Brac y aunque se prevé que Beryl se debilite ligeramente en los próximos días, seguirá teniendo fuerza de huracán de categoría 3 o mayor a su paso cerca o sobre las Islas Caimán el jueves y de la península del Yucatán, en México, el viernes, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
También había un aviso de huracán en la costa sur de Haití y en la costa oriental de Yucatán. Belice emitió un aviso de tormenta tropical desde su frontera con México hasta la Ciudad de Belice.
Hasta ahora, el huracán ha dejado al menos tres fallecidos en Granada, donde la tormenta tocó tierra el lunes; uno en San Vicente y las Granadinas y tres en Venezuela, según las autoridades locales.