Por: Milenio
Mazatlán, Sinaloa.- La Asociación de Hoteles de Mazatlán Tres Islas informó que, derivado de la situación de inseguridad en algunas partes de Sinaloa, alrededor del 6 al 7 por ciento de las reservas de viajes hacia esta playa han sido reprogramadas para los próximos días.
Reprogramaciones sin cancelaciones
En una entrevista, José Ramón Manguart Sánchez, presidente del organismo, explicó que, por el momento, no se han dado cancelaciones de turistas, por lo que esperan que el escenario mejore en los próximos días.
Impacto en Mazatlán es menor
Manguart Sánchez detalló que las reprogramaciones son para retomar los viajes hacia Mazatlán en los próximos 15 a 30 días. A pesar de los enfrentamientos entre presuntos grupos delictivos en Culiacán, Sinaloa, las afectaciones en Mazatlán han sido menores, y la vida cotidiana y de los viajeros se mantiene sin contratiempos.
Promoción y expectativas de crecimiento
“Es muy importante que continuemos con la promoción nacional e internacional, trabajos que realizamos a través de un consejo consultivo, con la participación de todos los actores del sector”, mencionó Manguart Sánchez.
El directivo destacó el crecimiento de la oferta hotelera en los últimos años, con más de 13 mil habitaciones actualmente, y señaló que ya se trabaja para tener una exitosa temporada de invierno, donde se prevé un aumento del ocho al 10 por ciento en la llegada de turistas internacionales.
En Sinaloa, la situación de violencia ha escalado drásticamente en las últimas semanas, con varios ataques armados que han dejado múltiples muertos. Los enfrentamientos entre grupos criminales y las fuerzas de seguridad han sido frecuentes, y la ciudad de Culiacán se ha convertido en el epicentro de esta crisis.
Además de los ataques letales, se han registrado secuestros y asaltos a instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Estos eventos muestran el creciente desafío que representa el crimen organizado, que parece operar con impunidad en la región.
En respuesta a la crisis, las autoridades han intensificado sus esfuerzos de seguridad, con despliegues adicionales de fuerzas policiales y militares para tratar de restaurar el orden y controlar la violencia. La situación sigue siendo crítica y plantea serios desafíos para la seguridad pública en Sinaloa.