El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, llegarán a la cumbre este viernes en Alaska con prioridades opuestas, mientras se preparan para sostener conversaciones acerca del fin de la guerra rusa en Ucrania.
Putin ha sido consistente en su deseo de querer ganar territorio ucraniano, mientras que Trump no ha ocultado su deseo de actuar como pacificador global.
Pero ambos también podrían percibir otras oportunidades, como la rehabilitación diplomática de Putin en el escenario mundial.
Las conversaciones comenzarán a las 11:30 horas (1:30 p.m. hora de la CDMX) y los dos gobernantes darán una conferencia de prensa conjunta después del encuentro en la base aérea de Elmendorf, en Anchorage, declaró el jueves a periodistas el consejero diplomático de Putin, Yuri Ushakov.
Luego se organizará una conferencia de prensa para hacer un balance de lo discutido, agregó.
Las conversaciones entre Donald Trump y Vladimir Putin podrían durar “al menos de 6 a 7 horas”, declaró el portavoz del Kremlin, según medios estatales rusos.
El Kremlin anunció a principios de esta semana que los líderes contarán con la asistencia de intérpretes durante una conversación individual al inicio de la cumbre, antes de continuar las conversaciones durante un almuerzo de negocios.
La mayoría de las posturas de Trump sobre la guerra en Ucrania han sido efímeras. En el transcurso de unos pocos meses, ha criticado duramente al presidente Volodymyr Zelensky y cancelado toda la ayuda militar a Kyiv, solo para luego aumentar el suministro de armas y dirigir su frustración hacia el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Su última rueda de prensa conjunta se celebró en 2018 cuando los dos mandatarios se reunieron en Helsinki.