El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, aseguró que su país se encuentra en estado de guerra tras las acciones violentas protagonizadas por bandas del crimen organizado, que le llevó a declarar el conflicto armado interno.
El mandatario anticipó que no piensa negociar ni ceder a quienes su gobierno ha calificado como “terroristas”, en su primera intervención pública desde el estallido de la crisis
La ola de inseguridad inició con la fuga de la cárcel de Adolfo Macías ‘Fito’, líder de la banda criminal “Los Choneros”, antes de que fuera trasladado y aislado en una cárcel de máxima seguridad. Las acciones violentas de los últimos días son la respuesta a ello.
El mandatario ordenó a las fuerzas militares restablecer el orden en las calles después de que hombres armados irrumpieran en el canal de televisión TC de Guayaquil y tomaran como rehenes a su personal durante una transmisión en directo.
A este incidente se sumaron incursiones de grupos armados en universidades y otras instituciones públicas, así como saqueos en Quito.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, anunció este miércoles que habrá medidas contundentes en la lucha contra la violencia, en que advirtió que los jueces que colaboren con terroristas también serán considerados parte de la red de terrorismo y que deportará a extranjeros que estén presos en el país.
Noboa subrayó la importancia de reconocer a estos grupos como terroristas y no simplemente como organizaciones delictivas, ya que esto permite la aplicación de leyes específicas y del Derecho Internacional Humanitario.
La crisis de seguridad que sufre Ecuador se ha agravado especialmente en los últimos tres años, en 2023 batió su récord histórico de homicidios con 7.878, de los que solo se resolvieron 584.
El país ha pasado a ser un importante centro regional de almacenamiento, procesamiento y distribución de droga, lo que ha fortalecido a las más de 20 bandas criminales que operan en él, según la BBC.