La Armada de Indonesia declaró este sábado que luego de haber encontrado objetos del submarino desaparecido, se concluyó que la nave naufragó y se partió, causando la muerte de los 53 tripulantes a bordo.
Hadi Tjahjanto, jefe militar, informó que la presencia de una mancha de petróleo y escombros cerca del sitio donde el submarino se sumergió por última vez el miércoles frente a la isla de Bali eran una prueba clara del naufragio del KRI Nanggala 402.
Los rescatistas hallaron varios artículos pertenecientes al KRI Nanggala 402, como partes de un alineador de torpedos, una botella de grasa que se cree que se usaba para engrasar el periscopio, restos de alfombras de oración y una pieza rota de un tubo de refrigerante que se reacondicionó en el submarino en Corea del Sur en 2012.
El jefe de la Armada, Yudo Margono, dijo en una conferencia de prensa en Bali que estaba descartada una explosión, en cuyo caso “habría pedazos”.
La causa de la desaparición es misteriosa; la Armada apuntó que una falla eléctrica podría haber impedido que el submarino ejecutara procedimientos de emergencia para salir a la superficie.
Hasta el momento no se han encontrado cadáveres, pero las autoridades habían dicho antes que la tripulación se quedaría sin oxígeno a primera hora del sábado.
Aunque no había habido indicios de vida desde el submarino, las familias de la tripulación mantenían la esperanza.
El presidente del país, Joko Widodo, ordenó que se hiciera todo lo posible para localizar el submarino y pidió a los indonesios que oraran por el regreso seguro de la tripulación.