Julio Fernández | Piedras Negras.- Los amantes de lo ajeno, no respetan edades, ni religiones, puesto que el inmueble afectado, fue la iglesia San Antonio de Padua, ubicada en la colonia San Joaquín.
El Sacristán de dicha parroquia, acudió a la Fiscalía General del Estado, para denunciar dicho robo, luego de que se llevaran dos cajas fuertes y diversos objetos de valor.
Además, el coordinador de agentes del ministerio público, Santiago Espinoza, declaró que se realizaron diversos daños en los accesos, por parte de los delincuentes.
La dependencia estatal de seguridad, busca esclarecer esta robo, que fue de total repudio por parte de la ciudadania y de los fieles creyentes.