Ricardo Bueno | Piedras Negras, Coah.- Tristeza y preocupación son los sentimientos que predominan ante la medida de las autoridades de Estados Unidos de colocar boyas en el rio Bravo, con el fin de frenar el paso de los migrantes, medida que viene a sumar a las ya impuestas, como el alambre de púas y los contenedores sobre la rivera del rio, exhortando las autoridades eclesiásticas a profundizar en el fenómeno migratorio que se viene presentando y que va en aumento, debido a las situación de los países centroamericanos principalmente.
Alonso Garza Treviño, Obispo de la Diócesis de Piedras Negras, detalló que son respetuosos de las decisiones que tomen los gobiernos vecinos, pero manifestó que ni las boyas ni cualquier otra medida frenará el paso de los migrantes, lo que si causará son situaciones de riesgo en la vida de las personas que intentan llegar a los Estados Unidos de manera ilegal, ya que las condiciones del clima y otros riesgos existentes han cobrado la vida de muchas personas.
Con respecto a ejercer alguna queja ante organismo internacionales, el Obispo indicó que, en lo personal, no tiene ninguna autoridad, dado que no representa alguna agrupación de la iglesia en estos momentos, pero en septiembre habrá una reunión con la diócesis de Texas, donde muy seguramente tratarán el tema y tendrán un posicionamiento hacía esta y las diversas medidas impuestas por el gobierno de Estados Unidos.