Efraín González | Piedras Negras, Coah.- Este sábado 18 de agosto se cumplió un año de la sorpresiva entrega del sacerdote Juan Manuel Riojas Martínez el “Padre Meño”, tras haber estado prófugo por más de cuatro meses por una denuncia de abuso sexual de menores, interpuesta por el entonces seminarista Javier Calzada, sin que hasta la fecha se haya dictado una sentencia en contra del aún presbítero.
El padre Meño continúa preso en el área de indiciados del CERESO de Piedras Negras a la espera de su juicio, que podría realizarse a más tardar el siguiente mes de septiembre.
A un año de la entrega de Riojas Martínez, se desconocen importantes datos como el lugar donde permaneció escondido durante los cuatro meses que huyó de la orden de aprehensión girada en su contra.
Defensores de víctimas de abusos sexuales clericales como Joaquín Aguilar, representante de SNAP en México, quien considera este caso como uno de los mejor documentados para poder formalizar una sentencia a Riojas Martínez, ex rector del seminario de Piedras Negras donde habría cometido una serie de ataques sexuales contra el mencionado seminarista durante el año 2015.