El hijo del presidente de los Estados Unidos, Hunter Biden, se declaró culpable de los cargos por los que estaba imputado: evasión de impuestos y posesión ilegal de arma de fuego, ha anunciado la fiscalía este martes 20 de junio.
Al declararse culpable, Biden evita ingresar en prisión. Esto es parte de un acuerdo con el Departamento de Justicia.
“El presidente y la primera dama aman a su hijo y lo apoyan mientras continúa reconstruyendo su vida. No tendremos más comentarios”, declaró el portavoz de la Casa Blanca.
El hijo del presidente se ha convertido en la mayor fuente de escándalos para su padre.
Sus negocios en Ucrania y China han sido criticados por los republicanos, y condujeron al primer juicio político de impeachment de Donald Trump en 2019. Sus problemas con las drogas y el fisco han llevado a esta investigación de la fiscalía, que ha durado cinco años y acaba a más de un año de que haya elecciones presidenciales.
El acuerdo de declaración de culpabilidad tendrá repercusiones inmediatas en las presidenciales de 2024.
Su padre no está siendo investigado en el marco de la indagación de actividades empresariales de su hijo, según fuentes que han sido informadas, pero ha planteado persistentemente preguntas sobre la ética y el comportamiento de Hunter y ha alimentado los ataques políticos de la derecha.