Redacción.- Este 31 de diciembre decenas de manifestantes irrumpieron en la sede diplomática de Estados Unidos en Bagdad e incendiaron la valla exterior de la embajada en respuesta a los ataques aéreos donde 24 miembros de la milicia iraquí, Kataib Hezbollah, murieron el pasado fin de semana.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó a Irán de “orquestar” este ataque contra la embajada.
Iran killed an American contractor, wounding many. We strongly responded, and always will. Now Iran is orchestrating an attack on the U.S. Embassy in Iraq. They will be held fully responsible. In addition, we expect Iraq to use its forces to protect the Embassy, and so notified!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) December 31, 2019
“Son completamente responsables”, aseguró el mandatario y agregó que las expectativas eran que Irak “use sus fuerzas para proteger la sede diplomática”.
El pasado 29 de diciembre, el secretario adjunto del Pentágono, Jonathan Hoffman, aseguró que había llevado a cabo una serie de “ataques defensivos” contra cinco instalaciones de Kataeb Hizbulá en Irak y Siria, en represalia al atentado del grupo hacia una base estadounidense cerca de la ciudad iraquí de Kirkuk.
De acuerdo con las autoridades estadounidenses, el objetivo fue reducir las capacidades de Hizbulá de “realizar ataques en el futuro” contra las fuerzas de la coalición encabezada por Estados Unidos.
Estados Unidos también acusó a la milicia de haber cometido un ataque con misiles contra una base militar iraní el pasado 27 de diciembre en donde un contratista estadounidense murió y otros miembros más del servicio resultaron heridos.