“Se me está acabando el tiempo” fue lo que declaró una mujer de 104 años que está pasando el confinamiento en un asilo de ancianos; Mary Fowler se grabó llorando y suplicando que la dejen ver a su familia, pues desde que empezó la pandemia, no ha podido estar con ellos.
Aunque la mujer escocesa lucha por contener las lágrimas no lo logra y pide desesperadamente ver a su familia. Comunicó que aunque la tratan bien en el lugar que reside, está en su derecho de ver a sus hijos.
“Aquí me cuidan muy bien. Pero quiero a mi familia. Este es mi derecho, por favor ayuda”
Su grito desesperado de ayuda se volvió viral en las redes sociales, luego de que la usuaria Cathie Russell subiera el clip a Twitter:
El impactante video refleja un poco de lo que las personas de la tercera edad viven, ya sea encerradas en los asilos o en casa, en donde sus seres queridos no las ven por miedo a contagiarlas.