La aerolínea Emirates realizó este lunes 30 de enero un vuelo de prueba exitoso de un Boeing 777 con un motor que utilizaba un combustible de avión descrito como sostenible, en un momento en que las operadoras de todo el mundo intentan reducir su huella de carbono.
El vuelo EK2646 hizo un trayecto de casi una hora por la costa de Emiratos Árabes Unidos tras despegar en el Aeropuerto Internacional de Dubái y dirigirse hacia el Golfo Pérsico antes de dar la vuelta para volver a tierra.
El combustible nuevo funcionaba en uno de los dos motores de General Electric Co. del Boeing, mientras que el otro utilizó combustible convencional por seguridad.
Emirates, una compañía estatal controlada por el gobernante de Dubái, el jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum, describió el combustible sostenible como una mezcla “que equipara las cualidades del combustible de avión”.
Incluía combustible de Neste, una firma finlandesa, y Virent, una compañía de Madison, Wisconsin.
Virent dice emplear azúcares de origen vegetal para fabricar los componentes necesarios para un combustible de avión sostenible, mientras que el producto de Neste procede de grasas animales y aceites vegetales. Esos combustibles reducen las emisiones de dióxido de carbono, un gas que atrapa el calor en la atmósfera, que suelen producir los motores de avión.
Los fabricantes de aviones y motores han diseñado modelos más eficientes, en parte para ayudar a mantener bajos los costes de combustible de aviones, uno de los principales gastos que enfrentan las aerolíneas.