El 28 de febrero de 2025, los cielos nocturnos de la Tierra ofrecerán un espectáculo extraordinario: los siete planetas visibles del Sistema Solar se alinearán en una formación que podrá observarse desde nuestro planeta.
Este fenómeno, conocido como gran alineación planetaria, incluirá a Saturno, Mercurio, Neptuno, Venus, Urano, Júpiter y Marte en una disposición que, aunque no es una alineación perfecta en el sentido físico, será un deleite visual para los observadores.
Es uno de los eventos más destacados del año para los amantes de la astronomía, ya que no volverá a repetirse hasta el año 2492.
Antes, el 21 de enero de 2025, se producirá otra alineación significativa en la que seis planetas -Marte, Júpiter, Urano, Neptuno, Venus y Saturno- serán visibles simultáneamente, con la única ausencia de Mercurio.
Esto sucede porque todos los planetas del Sistema Solar orbitan alrededor del Sol en un plano llamado eclíptica, una línea imaginaria que refleja la trayectoria de sus órbitas. Aunque las órbitas de algunos planetas están ligeramente inclinadas respecto a este plano, todos se mantienen aproximadamente al mismo nivel, lo que permite que, en ocasiones, parezcan alinearse.
Según ScienceAlert, cualquier agrupación de tres a ocho planetas puede considerarse una alineación, pero las combinaciones de cinco o más planetas son menos frecuentes.
Las alineaciones de cinco planetas ocurren con mayor regularidad, mientras que las de seis son más inusuales, sin embargo, las alineaciones de siete planetas, como la que se verá en febrero de 2025, son extremadamente raras y constituyen un evento astronómico excepcional.
La visibilidad de las alineaciones planetarias dependerá de la ubicación geográfica del observador y de las condiciones climáticas.
Aunque puede observarse desde ambos hemisferios, quienes se encuentran cerca del ecuador, especialmente en el hemisferio norte, tienen mejores condiciones, ya que los planetas aparecen más altos en el cielo.