Hasta la eternidad y más allá… Celebran bodas de Brillantes ante 75 años de matrimonio

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Irene Zapata | Saltillo, Coah.- El respeto y el perdón han sido la clave de su matrimonio, 75 años juntos, se dicen fácil pero no lo es siempre, pues en las buenas y en las malas ellos han vencido obstáculos logrando con esto celebrar sus “bodas de Plata”, “de Oro”, y una vez más se juraron amor eterno en sus “bodas de Brillantes”.

“Beso, beso, beso”, ovacionaban los invitados a la boda de Manuela Gaytán Pedroza y Gregorio Tovar Martínez, de 91 y 96 años.

Ellos con andadera y bastón se dirigieron a la iglesia del Espíritu Santo en la colonia Topo chico, regresaron frente a quien hace 75 años se juraron amor hasta que la muerte los separe.

“Es mucho tiempo el que ya Dios me dio con ella, la conquisté con “papelitos”, le escribía cartas, me enamoré de ella desde “chiquita”, ella para mí es mucha mujer”, expresaba Manuel mientras sus ojos humedecían.

Mientras ellos se encontraban frente al altar, sus 9 hijos los rodeaban para ser testigos de una nueva promesa de amor y es que de nueva cuenta, para la eternidad.

“La vive uno muy bien, en las buenas y en las malas, se necesita mucho amor, y saber llevar a la familia y saber guiar a los hijos, platicamos y nos acordamos de tiempo, desde que estábamos jóvenes hasta ahorita, y la amo mucho” dijo Manuel, al asegurar que Manuela, no sólo es su pareja, sino también su cómplice.

Día a día ella lo ha escuchado, ha apoyado y ha guardado sus secretos celosamente, para que así nadie los haya alcanzado y eso es lo que pone más “sabor” a su relación cuenta el matrimonio.

“El respeto y el perdón la clave de matrimonio”

Ellos lamentan hoy en día los matrimonios duren poco tiempo y terminen en divorcio, pues las generaciones de hoy son intolerantes y contradictorias

Pero cuál es la clave de su matrimonio?

“Respeto y perdón el “aguantar vara”, también nos han ayudado.

“Enamorarse muchas veces de la misma persona”

Las arrugas en su piel representan toda una historia esa en la a través de 75 años de matrimonio han logrado superar las adversidades de la vida, problemas económicos, malos entendimientos, enfermedades entre otras cosas.

Una vida en donde han logrado sacar asus nueve hijos adelante y donde confirman que: el éxito de un matrimonio requiere enamorarse muchas veces de la misma persona.

Teniendo a dios frente a testigo, Manuela y Gregorio otra vez prometieron amarse hasta que la muerte los separe, dos argollas en sus dedos prueba de ello.