El líder Kim Jong-un rindió tributo a su abuelo, fundador de Corea del Norte, visitando el mausoleo donde yacen sus restos embalsamados en Pyongyang.
Se trata de un momento marcado por sus escasas apariciones públicas y las actuales relaciones con Seúl y Washington, además de rumores de su salud.
En el homenaje puede verse también a Kim Yo-jong, su hermana menor, situada en la tercera fila de oficiales que formaron la principal comitiva junto con el supremo líder.
La visita a Kumsusan, donde también descansan los restos momificados de su padre, Kim Jong-il fallecido en 2011, ha sido una de las escasas comparecencias públicas en los últimos meses. Estas prolongadas ausencias se producen a su vez en un año marcado por la pandemia de COVID-19.
Además este mismo miércoles, el vicesecretario de Estado de Estados Unidos, Stephen Biegun, se encuentra en Seúl para analizar la situación en la península y el diálogo con el Norte sobre desnuclearización, atascado desde la cumbre de Hanói de 2019.