Agencias.- El número de muertos en el tiroteo en una escuela de Suzano, en la región metropolitana de Sao Paulo, subió a diez y el de heridos se situó también en esa cantidad, informaron este miércoles las autoridades de Brasilen un balance provisional.
Imágenes de la televisión local mostraban a decenas de personas en las afueras de la escuela, junto con policías y vehículos de bomberos.
Según la Policía Militarizada de Sao Paulo, al menos cinco adolescentes murieron dentro de la escuela secundaria, un empleado de la institución y los dos autores de los disparos, que se suicidaron en los pasillos del local.
Las otras dos personas fallecieron en el hospital al que fueron trasladados después del suceso, sin confirmarse si se trataban de menores de edad, según dijo a los medios la portavoz de la Policía Militarizada, Capitana Cibelle.
Você acompanha agora no #PrimeiroImpacto a cobertura completa do tiroteio na escola de Suzano, em São Paulo. Já são 5 mortos confirmados no interior. A polícia está agora dentro da escola realizando buscas pic.twitter.com/dZOnGfILYq
— SBT – Rio (@sbtrio) March 13, 2019
Los cuerpos de las víctimas mortales se encuentran todavía dentro de las instalaciones educativas.
La Policía Militarizada explicó que “dos encapuchados, aparentemente dos adolescentes” entraron esta mañana en la escuela Raúl Brasil, en Suzano, a unos 60 kilómetros de la capital paulista, y “efectuaron varios disparos”.
Asimismo, los agresores hirieron de bala a un propietario de un comercio local, quien fue ingresado en un hospital de la región en estado grave.
Las autoridades aún no confirmaron las razones del ataque ni las identidades de los estudiantes asesinados, pero informaron que tienen edades entre 15 y 17 años.
Se desplazaron al lugar del sucesos seis unidades de rescate, tres unidades de ambulancias, dos helicópteros de la Policía Militarizada y unidades especializadas en desactivar explosivos.
Según la Policía Militarizada, “los individuos portaban un número no identificado de revólveres, así como artefactos en mochilas semejantes a explosivos”, que están en vías de examinarse, y además tenían “machetes” y “un arco y flecha”.
Las capuchas de los atacantes llevaban impresas dibujos de calaveras en la parte frontal.
El Comercio