Una ola de tsunami de tres metros de altura alcanzó el malecón de la planta de energía nuclear de Shika, en la prefectura de Ishikawa, Japón, tras el terremoto de magnitud 7,6 que sacudió la semana pasada.
Datos publicados por el operador de la central, Hokuriku Electric Power Company, indican que los medidores del nivel del mar registraron el tsunami alrededor de las seis de la tarde del pasado 1 de enero, dos horas después del temblor.
Aunque ni esta, ni otras olas menores que se alzaron cerca de la base de Shika después del sismo causaron daños significativos en la planta, que cuenta con un malecón de cuatro metros para defenderse de potenciales tsunamis.
Algunos de los sistemas de la central que reciben electricidad externa dejaron de funcionar después de que el terremoto dañase las tuberías de los transformadores, por lo que se está recurriendo a otros medios para suministrar energía a algunos equipos.
Según las últimas cifras indicadas por las autoridades locales de la prefectura de Ishikawa, la más afectada, el sismo deja ya 203 muertos y 68 desparecidos.