Redacción.- Un cocodrilo devoró a un niño de diez años frente a su familia, mientras viajaban en una barca en Filipinas, según ha informado The Independent.
El pequeño se encontraba de vacaciones junto a su familia en un paseo cuando, de pronto, el animal se asomó y le tiró con fuerza.
En un forcejeo, el padre intentó devolver a su hijo al bote, sin éxito. Segundos después, trataron de buscarlo pero no lo encontraron. Horas después, un pescador descubrió el cuerpo en un manglar cercano.
Los cocodrilos de esa zona pueden llegar a medir 5 metros y pesar hasta una tonelada y además la zona es especialmente conocida por este tipo de ataques.
Ante tan terrible accidente, Jovic Pabello, portavoz de un consejo gubernamental para la conservación del medio ambiente, ha reconocido que “se llevan registrando casos continuos en la ciudad de Balabac desde 2005”.
Y es que en febrero de este mismo año, otro cocodrilo atacó a un niño de 12 años que nadaba en el mismo río. Por suerte, este pequeño sí que logró salvarse gracias a sus hermanos golpearon en la cabeza al reptil hasta que le soltó.
